David Silva nunca jugó en el Madrid, pero Florentino tiene muchas esperanzas con él

El jugador canario fue un gran deseo del preisdente que nunca llegó a darse, pero ahora puede enseñarle mucho a Takefusa Kubo

22 de Diciembre de 2022
David Silva y Takefusa Kubo se saludaban en un encuentro de esta temporada
David Silva y Takefusa Kubo se saludaban en un encuentro de esta temporada

La estancia de Takefusa en San Sebastián no es casualidad. El jugador nipón que milita ahora en la Real Sociedad, comparte vestuario con auténticas leyendas del fútbol español como el genio de David Silva. El canario un erudito en esto de ingeniárselas con el balón, ha conseguido realizar una trayectoria inmaculada.

Posiblemente ya esté en la recta final de su carrera deportiva, pero quien tuvo retuvo dice el dicho. Pues con el volante de la Real nadie tenía dudas que aun estando en edad avanzada su fichaje iba a ser un auténtico bombazo.

En Anoeta se ilusionaron todos con su nombre y desde su llegada, el equipo también ha pegado un salto de calidad tremendo. Eso justifica lo bien que juegan los pupilos de Imanol Alguacil. La batuta la mueve David y se juega a lo que él mismo diga.

La nueva sociedad perfecta
 

Al experimentado atacante le han rodeado de buenos o prometedores jugadores. El madridista, quizá encaja más en ese segundo grupo, pero todo lo que está siendo capaz de hacer no es baladí. Desde Chamartín están tomando nota y es que no todos los días un jugador puede recibir auténticas clases magistrales de un maestro.


Al que jugaba con el “21” a la espalda en la selección española, ya se le intentó traer alguna que otra vez para que jugara en el Bernabéu. Pero aquel fichaje se acabó frustrando y el tipo escapó antes de tiempo a Inglaterra. Desde la ribera del Turia, no le pusieron las cosas fáciles con la rivalidad entre uno y otro club.

Precisamente la historia nos recuerda que los chés se enfadaron y de qué manera, cuando el madridismo sí que cazó entonces a Petja Mijatovic. El tobillo mágico debió haber recalado en las filas blancas y eso todo el mundo lo supo. No era una cuestión económica o deportiva, sino que más bien fue algo entre los despachos.

El sueño roto desde Valencia
 

En Valencia se acobardaron, al saber de primera mano, que aquel joven que asomaba la cabeza a tan corta edad, iba a derrumbar la puerta del fútbol mundial y su nombre sería coreado en la mayoría de estadios por los que pasaría.

 Así que lo enviaron lejos, bien lejos para que nadie supiera de él. Estos sacaron una buena tajada por él y se olvidaron. Se lo vendieron entonces al pequeño petrodólar que estaba naciendo: el Manchester City.


Silva fue la primera piedra angular del proyecto inglés. El madridismo lo echaba mucho de menos, pero con el tiempo solo tuvo que acostumbrarse a ese vacío enorme. Aunque por calidad, este equipo va auténticamente sobrado.

Así que más o menos, fue fácil decirle adiós. Después acabó creciendo y quizá algún día se dio cuenta de lo mucho que habría ganado, de aceptar el reto de Florentino. Sería tres veces más el jugador que sería en la actualidad. Un tipo avanzado en el tiempo.

Su calidad abismal
 

Aquel que no le hace falta levantar mucho la cabeza para saber dónde están sus compañeros. A día de hoy sigue jugando de memoria, combinando de dulce y levantando a la gente de su sofá.

Pocos pueden decir que algún día jugaron al lado del mismísimo David Silva. Siempre será el gran juguete roto que nunca acabó llegando. Ahora junto a Kubo a su lado, el Real Madrid puede respirar algo más tranquilo y por fin encontrarle acomodo y cargarse de razones porque ficharon aquel japonés con aspiraciones a ser el mejor futbolista asiático que ha pasado por la Liga española.

Veremos cuál es su balance en el norte. Por ahora ya ha pasado por otros equipos como el: Mallorca, Villareal o Getafe, pero sin mucho éxito. ¿Qué le depararán la Real Sociedad y David Silva?

Archivado en: