El Real Madrid cerró el año pasado el fichaje de Kylian Mbappé y el jugador pudo cumplir el sueño de su vida después de que sufriera varios vaivenes por parte del PSG, su anterior equipo, que vetó en varias ocasiones su salida del Parque de los Príncipes para acabar siendo blanco. Siete largos años de espera merecieron la pena, sin embargo, y el ‘9’ está en un gran momento de forma, aunque ahora mismo esté con problemas estomacales.
La ‘cárcel’ que habría sufrido Mbappé en el PSG podría ser mucho peor de lo que nos tememos y el jugador está lejos de olvidar el calvario que ha padecido antes de llegar al Santiago Bernabéu. Después de reclamar 55 millones de euros por impagos, el futbolista habría elevado sus quejas formales y, de nuevo, acudido a la Justicia para denunciar varias prácticas mafiosas del París.

Según ha adelantado la Agence France-Presse, la agenda de noticias más antigua en el mundo, Mbppé habría presentado una demanda contra el PSG por acoso. El delantero no tendría buen recuerdo de sus últimos meses en París, en un ambiente hostil hacia su máximo goleador histórico, que también está en su legítimo derecho de decidir dónde quiere jugar.
Del mismo modo, Kylian también ha presentado una demanda contra el PSG por intento de extorsión, ya que intentaron obligarle a firmar un nuevo contrato en 2023 prohibiéndole entrenar con el equipo. Una línea de actuación muy típica en Nasser Al-Khelaifi, el presidente del club galo.
Más problemas del PSG
No son los primeros problemas a los que se enfrenta el PSG, que ya tiene un pleito en curso con Mbappé, y hace días fue condenado a pagar 1,3 millones de euros a Adrien Rabiot después de que el centrocampista, que salió libre en 2019, fuera suspendido de empleo y sueldo meses antes de dejar el equipo.
El PSG se ha caracterizado desde hace años por ser un equipo inflexible que no deja ‘escapar’ a sus futbolistas. Algo antitético con lo que siempre ha sido el deporte rey, al menos en Occidente, donde siempre ha primado la voluntad de los jugadores. Pero en Oriente, se ve, no son de ese mismo parecer y sus autocracias se expanden hasta el mismo fútbol…