Las dos formas en las que el Real Madrid podría entrar en los eSports

El club presidido por Florentino Pérez tendría varias vías de entrar en este negocio

Periodista
08 de Junio de 2022
Florentino Pérez en la Asamblea General Extraordinaria de Socios celebrada en 2018
Florentino Pérez en la Asamblea General Extraordinaria de Socios celebrada en 2018

El Real Madrid es reacio a entrar en los eSports. Este es un hecho que limita, en cierto modo, el crecimiento absoluto de uno de los clubes más importantes de todo el mundo del deporte y que mayor impacto ha tenido en la historia de nuestro país y continente. Sin embargo, la reticencia de la entidad de Concha Espina está más que justificada.

La inversión inicial para entrar en los eSports supone un elevado precio que el Real Madrid, por el momento, no está dispuesto a asumir. Asimismo, el conjunto blanco podría utilizar el ya remodelado Santiago Bernabéu como sede local para los partidos más imporantes de la temporada, con el objetivo de que el carácter polivalente del nuevo Estadio sea aprovechado al máximo

A pesar de todo, la situación del club blanco ofrece, actualmente, dos vías de incorporación al negocio de los eSports. La primera de ellas sería mediante la creación de un equipo propio de eSports, fundando una escuadra desde cero y tomando en cuenta todos los aspectos necesarios para su correcta puesta en marcha. Esta sería, quizá, la opción menos costosa para la entidad presidida por Florentino Pérez, que considera necesaria una inversión en eSports pero todavía no se atreve a dar el salto. 

Un asesor de lujo para esta opción podría ser Carlos Henrique Casemiro, que ha fundado desde cero su propia escuadra, Case Esports. Con la guía y los consejos del brasileño, quizá el Real Madrid podría disponer en un futuro no muy lejano de su propio club de eSports.

Otra de las opciones, quien sabe si más rentable económicamente, sería la absorción de una de las escuadras ya existentes y un cambio de nombre para adecuarla a la disciplina del club blanco. De esta forma se podría ahorrar todo el gasto en construir una escuadra desde cero, pero se debería invertir una cantidad considerable de fondos en adquirir la propiedad de la escuadra y en el cambio de identidad.

Sea como fuere, el Real Madrid sopesa muy detenidamente entrar en uno de los negocios deportivos más boyantes y espectaculares de los últimos tiempos, cuya unión con el fútbol podría conformar una mezcla imposible de batir por otros rivales, tanto dentro como fuera de los estadios de fútbol o las arenas de eSports, siempre y cuando ambos equipos lleven el color blanco y sientan el escudo del club más grande de todos los tiempos.