Eduardo Camavinga fue la sorpresa para muchos en el once inicial de Xabi Alonso frente al FC Barcelona. El francés empezó en el medio del campo, acompañando a Tchouamèni y a Arda Güler, para pasar a la derecha al cuarto de hora del partido, dónde realizó un gran trabajo para el equipo.
El Manchester United, está muy interesado en su fichaje, conocedor de que necesita una pieza de la calidad del galo para su centro del campo.
Eduardo Camavinga es un objeto de deseo del Manchester United, pero Xabi Alonso confía en sus grandes condiciones como centrocampista
A sus 22 años no ha conseguido consolidarse como titular indiscutible en el Real Madrid. Las lesiones han sido un gran hándicap para que ello hubiese sido posible. Pero también que juega en muchas ocasiones acelerado, siendo incapaz de darle pausa a su fútbol.
Esta es una de sus áreas de mejora, en la que tratará de incidir Xabi Alonso, que lo considera un gran jugador y está dispuesto a darle su confianza y a corregirle sus errores, para convertirlo en uno de los mejores centrocampistas del mundo. A día de hoy, la realidad es que Camavinga no es uno de los intocables de la plantilla, que no son muchos.
Camavinga no es intocable, y una oferta de 80 millones de euros podría llevarlo a la Premier League el próximo verano
Mbappé, Courtois, Militão, Huijsen, Tchouamèni, Bellingham y Valverde, parece que son los únicos que gozan de ese ‘status’, ni siquiera Vinicius Junior lo tiene. El brasileño ha comenzado la temporada siendo tres veces suplente en los trece partidos disputados, de los cuáles sólo ha completado tres.
Es una situación nueva para él. La llegada del técnico tolosarra ha llevado al extremo merengue a otra situación dentro del equipo, lo que ha provocado que estallase tras su cambio en El Clásico el pasado domingo.
Una imagen bastante lamentable del jugador blanco, cargando contra su entrenador y afirmando que se iría del equipo, antes de marcharse al vestuario, para luego volver, con la intención de celebrar la victoria blanca.
Camavinga por su parte, espera ganarse la confianza del entrenador con sus actuaciones, de lo contrario podría poner rumbo a Manchester, eso sí, siempre y cuando los británicos paguen los 80 millones de euros en los que el Real Madrid tasa al jugador en el mercado. Capacidad económica tienen, ya lo demostraron pagando más de 70 millones hace tres años por un jugador de 30 años como Casemiro.