Ibrahima Konaté tiene las horas contadas en el Liverpool. El central francés, que llegó procedente del Leipzig en 2021, está más fuera que dentro. Su salida se da por hecha en Inglaterra, y el club ya trabaja en su reemplazo.
El conjunto de Anfield busca central y no uno cualquiera. Quieren un líder para acompañar o suceder a Virgil van Dijk. Dos nombres están sobre la mesa: Nico Schlotterbeck (Borussia Dortmund) y Marc Guéhi (Crystal Palace). Ambos encajan en el perfil que Arne Slot ha pedido a la dirección deportiva.
Según The Athletic, el Liverpool no esperará mucho para activar su plan. Schlotterbeck, de 25 años, ha rechazado ampliar su contrato con el Dortmund. El Bayern también lo tiene en el radar, pero los reds ven en él un futuro pilar defensivo.
Guéhi, por su parte, gusta por su juventud (24 años), liderazgo y experiencia en la Premier. El pasado verano ya hubo contactos con el Palace por unos 40 millones de euros, pero la operación no llegó a cerrarse. En el club inglés saben que tarde o temprano llegará una nueva oferta.
Konaté se prepara para cambiar de aires
En paralelo, la situación de Konaté se ha vuelto insostenible. El jugador no ha renovado y su entorno empieza a filtrar que busca un cambio de escenario. El francés siente que su etapa en Liverpool ha tocado techo. Además, el interés del Real Madrid no ha pasado desapercibido.
Florentino Pérez lleva tiempo siguiendo su evolución. El plan es claro: reforzar el eje de la zaga para la temporada 2026-27 y Konaté encaja en ese proyecto. Desde Valdebebas se valora su físico, su lectura de juego y su madurez competitiva.
El calendario aprieta
El Liverpool no quiere repetir los errores del pasado. La grave lesión de Giovanni Leoni, una de las promesas defensivas del club, ha acelerado la toma de decisiones. Slot quiere tener a su nuevo central antes del verano, aunque no se descarta que el fichaje se adelante a enero si la situación se complica.
Todo apunta a que el adiós de Konaté marcará el inicio de una nueva era defensiva en Anfield. Un movimiento que, además, podría abrirle de par en par las puertas del Santiago Bernabéu.