Joan Laporta se había acercado a la UEFA y a la ECA en los últimos tiempos.
Había condicionado su vuelta a la disciplina del máximo organismo del fútbol continental, tras su inclusión en el proyecto de la Superliga, a unos cambios en el formato de la Champions League, que incluyesen una liguilla y la emisión gratuita en streaming, como él mismo había negociado, pero no le han hecho ningún caso y la máxima competición europea no contará con esos cambios en 2027.
La UEFA y la ECA pasan de Laporta y no acometen en la Champions de 2027, ninguno de los cambios que pidió el presidente azulgrana
“Como en Barcelona estamos por la pacificación del fútbol europeo, lo que queremos es que haya un acuerdo y volvamos a la UEFA. Es lo que quieren todos los clubes y en este sentido estamos trabajando”, afirmó el mandatario culé, en la última reunión de la ECA en Roma.
Da la sensación de que Laporta juega a dos bandas. La situación económica del club azulgrana, que está en la ruina más absoluta y el ‘Caso Negreira’, judicializado y que puede conllevar sanciones por parte de los organismos del fútbol internacional, han llevado a su presidente a traicionar a su socio en la Superliga, Florentino Pérez, para intentar tender puentes con los grandes enemigos de ese proyecto, que no son otros que Ceferin y Al Khelaifi.
Tras la derrota en el Bernabéu, a la crisis financiera, se le une la deportiva al FC Barcelona, que se encuentra a cinco puntos de los madridistas en la liga española, mientras que en Europa ya perdieron con el París Saint-Germain en casa.
Laporta, será considerado un traidor por las dos partes, la UEFA y la Superliga, ya saben cómo se las gasta el presidente del Barça
A pesar la pelota que le hizo Laporta al presidente del club francés, sus peticiones para la Champions han sido ignoradas.
Debería saber cómo se las gasta el qatarí, pero viendo las formas del máximo mandatario azulgrana, tampoco es que sea muy de fiar.
La Superliga está en ‘stand by’, gracias a la falta de seriedad de Laporta, que quiere quedar bien con todos, pero da la sensación de que será considerado un traidor por las dos partes. Mientras, Florentino Pérez no ha dicho ni una sola palabra sobre este acercamiento de su homónimo a la ECA y a la UEFA, pero es evidente que estará muy disgustado con la actitud del presidente azulgrana.