El Juvenil A del Real Madrid vivió una tarde memorable. Diego Martínez firmó un golazo desde su propio campo ante el Rayo Vallecano. Un disparo desde la parte del círculo central que pilló adelantado al portero visitante y que botó casi en la línea de gol antes de tocar la escuadra.
☄️ ¡Diego Martínez, desde su casa!
— Cantera Real Madrid (@lafabricacrm) September 14, 2025
🤯 Diego Martínez scores from waaaaay downtown!
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No fue un solo golpe de calidad. Diego completó un doblete y se convirtió en el gran protagonista del partido.
Dominio blanco desde el inicio
El encuentro, correspondiente al Grupo V de la Juvenil División de Honor, enfrentó al vigente campeón, dirigido por Julián López de Lema, contra un Rayo entrenado por Antonio Paredes. La primera mitad estuvo dominada por el Real Madrid, que controló la posesión y el ritmo del juego.
El primer gol llegó tras una combinación entre el capitán Carlos Díez y Lezcano, cuyo centro permitió a Diego inaugurar el marcador. El joven de La Fábrica dejó claro desde el inicio que quería liderar al equipo.
El Real Madrid generó varias oportunidades. Nacho Gascón estrelló un balón en el larguero y Adri Pérez salvó sobre la línea. La defensa del Rayo, con su portero Rubén Moreno como figura, logró contener el marcador hasta el descanso.
Golazo desde el centro del campo
En la segunda mitad, el ritmo bajó, pero Diego volvió a brillar. Aprovechó que el guardameta estaba adelantado y lanzó desde el círculo central. El balón recorrió todo el campo y acabó en la red. Un tanto que ya se perfila como uno de los mejores del año en categorías juveniles.
Poco después, el Rayo cometió un penalti sobre Alfonso. Carlos Díez no falló desde los once metros y firmó el 3-0 definitivo.
Julián López aprovechó para dar minutos a los jóvenes del banquillo. Entre ellos destacó Enzo Alves, hijo de Marcelo, quien debutó en La Fábrica esta temporada.
El Real Madrid cerró el encuentro con superioridad clara. Diego Martínez se llevó todos los focos con su doblete y su gol de fantasía. El penalti de Díez cerró la goleada y reflejó la jerarquía blanca en La Fábrica.
El Rayo, a pesar de su esfuerzo y del trabajo de su portero, no pudo frenar la pegada y el talento de los jóvenes merengues. La victoria deja al Juvenil A líder y con confianza para los próximos retos de la temporada.