La relación entre el Real Madrid y Valencia nunca ha sido la más acertada o la más correcta. Los vecinos del Turia, siempre le han tenido un recelo al equipo de la capital por su grandeza e historia que les corresponde. El madridismo es la envidia de muchos, pero estos han seguido intactos y a lo suyo haciendo su trabajo en cada partido disputado.
Aunque hay algunos que han hecho el camino a la inversa. Dejando de lado el orgullo, han accedido a hacer el camino de Valencia a triunfar en el Real Madrid. Concretamente la historia blanca refleja hasta ocho futbolistas que han ejercido ese camino.
Varios lo hicieron en la época de los años 60 y 70, aunque el primero que lo hizo data de 1940. Aunque varios de estos lo han hecho hace relativamente poco. La mitad de estos lo han hecho con el siglo XXI. Un gran descubrimiento para el fútbol español.
Los más antiguos de esta lista
El primer bloque del siglo pasado lo forman cuatro futbolistas: Antonio Calpe Hernández, José Antonio Grande Cereijo, Pascual Botella Domingo y Francisco Botella Montes. Estos dos últimos sin tener nada que ver entre ellos.
Calpe estuvo cerca de seis años en el primer equipo. Venía procedente del Levante y con los blancos cumplió casi el centenar de partidos (97). Se desarrollaba como defensa y en su palmarés contaba con: 3 Ligas, 1 Copa del Rey y 1 Champions.
Grande también nació en Valencia, pero este llegó a Madrid para jugar en el Rayo Vallecano primero. Después fichó por los de Chamartín y militó cinco años allí. Su registro fue más pobre, aunque llegó a los 83 encuentros con dos ligas y una Copa del Rey.
Por lo que hace a los Botella, el primero fue quizá el más recordado. Formó parte de una de las mayores goleadas que se ha dado nunca ante el FC. Barcelona, por 11-1 y eso que solo estuvo cuatro temporadas allí. 62 partidos jugados y poca cosa más para un delantero que volvió al que había sido siempre su equipo el Levante.
Francisco Botella, empezó su carrera como canterano madridista, pero poco le duró el éxito. Fue traspasado al Castellón y allí empezó una aventura en el litoral levantinista, pasando por equipos como el Hércules, Murcia o el Benidorm.
Los jugadores valencianistas de la era moderna
Los otros cuatro jugadores restantes: Albiol, Soldado, Chust y Cañizares, han tenido la misma suerte que los anteriores. Actualmente solo Cañizares sigue en el equipo, aunque lo hace en las categorías inferiores del club. Este es el hijo de Santi Cañizares, otro mítico guardameta que militó en su día en el equipo blanco.
Si miramos a los otros tres han hecho grandes carreras. Los defensores se han convertido en rivales madridistas. Ambos juegan de amarillo. Uno lo hace en el Villareal y el otro milita en el Cádiz. Aunque con una diferencia.
El segundo salió de la cantera y tras las dificultades por encontrar un sitio en el primer equipo, se mudó hace dos temporadas a tierras andaluzas. Allí se ha convertido prácticamente en un fijo y disfruta de muchos minutos, que son los que le faltaban en el primer equipo de Ancelotti.
Albiol y Soldado los que más suerte tuvieron
Por lo que hace a Albiol, vivió cuatro años fantásticos en la entidad, tras hacer historia con el Valencia. Su paso por el Real Madrid le brindó de títulos y experiencia para mudarse a Italia, donde encontró una gran estabilidad como jugador.
En el conjunto napolitano, se erigió como un héroe y vivió numerosas alegrías, aunque sin títulos. Tras terminar su etapa allí, volvió a España, pero para jugar en Villareal dónde es una pieza clave del proyecto “groguet”.
El último jugador que completa esta lista es Roberto Soldado. Un auténtico trotamundos en el mundo del fútbol. Su extensa trayectoria le ha hecho pasar por numerosos clubes de varios países: España, Inglaterra y Turquía.
Llegó a debutar con el primer equipo, pero sin mucha fortuna. Desde entonces su nombre ha sido relacionado con grandes proyectos. Ahora su fútbol pasa por un momento más relajado en segunda división.