La campaña contra Vini continúa, esta vez ha sido en Valladolid y secundada por la mayoría de medios deportivos. Los comentarios racistas deberían de ser eliminados de raíz de los estadios y la policía o la Liga debería perseguir este tipo de comportamientos así como a los que los llevan a cabo.
Gritos racistas
Estamos a punto de despedir 2022 y hay gente que parece vivir en la edad media, ayer Valladolid volvió a ser el mal ejemplo de algunos de los lastres sociales que cargamos como sociedad. Los racistas siguen entrando a los estadios y caminando a sus anchas.
El que grita y el que calla
Es curioso que en el vídeo que apareció en Twitter se escuchen diferentes insultos, algunos de ellos racistas. Pero es más sorprendente que nadie en la grada denunciara en ese momento este tipo de insultos. Nuestra sociedad tiene que cambiar.
Los terrenos de juego son cada vez más el espacio donde algunos aprovechan para camuflarse y lanzar sus iras raciales a los jugadores negros, ayer le volvió a tocar a Vinicius Junior.
Hay que parar los insultos en cualquier campo de fútbol. No es normal atacar a alguien por el color de su piel y menos delante de niños. La liga de Tebas. pic.twitter.com/KYCHJz5tXj
— Haiku_Lavage (@Haiku_Lavage) December 30, 2022
La Liga no se pronuncia
Hasta que el máximo responsable del campeonato nacional no se haga eco de estos insultos estos racistas y maleducados seguirán campando a sus anchas por los estadios de España en detrimento del respeto y la cordialidad.
Nadie en la liga ha tomado medidas hasta ahora por este tipo de insultos y parece que todo seguirá igual. A veces se olvida que las cualidades que nos hacen amar este deporte están muy alejadas de los insultos y actitudes racistas.