El futuro de Erling Haaland vuelve a ser noticia en Europa. El delantero noruego del Manchester City se ha convertido en el gran objetivo del PSG de cara al próximo mercado de verano.
El ariete atraviesa un momento espectacular. Ha marcado 22 goles en 19 partidos esta temporada y sigue siendo clave tanto en el City como en la selección de Noruega, a la que llevó al Mundial 2026 con 16 tantos en la fase de clasificación. Su impacto ha despertado el interés de París, que busca convertirlo en su próximo emblema.
PSG acelera por Haaland
El club parisino ya ha definido su estrategia. Con salidas previstas como las de Gonçalo Ramos y Kang-In Lee, el PSG necesita una estrella que lidere su ataque. Luis Enrique ve en Haaland al delantero perfecto para completar un frente ofensivo que ya cuenta con Dembélé, Kvaratskhelia, Barcola y Doué.
La operación preparada por París asusta: 200 millones de euros. Una cifra que deja claro el mensaje del PSG: recuperar la figura mediática que perdieron con la salida de Mbappé y reforzar su proyecto para la próxima Champions.
El Manchester City no facilita la operación. Consideran a Haaland intocable, pieza clave para mantener la hegemonía en Inglaterra y Europa. Sin embargo, en el club reconocen que si el jugador presiona, podrían abrir la puerta a la negociación.
Haaland, a sus 25 años, estudia con calma su futuro. Nunca ha cerrado la puerta a nuevas experiencias y podría valorar un cambio de aires si el proyecto deportivo convence.
El factor decisivo del proyecto
El PSG quiere consolidarse como potencia estable. Tras conquistar la Champions, buscan un símbolo que encabece una nueva etapa. Con Haaland creen tener al perfil perfecto para liderar la liga francesa y luchar de nuevo por la máxima competición europea.
El interés parisino refleja la ambición del club. Incorporar a Haaland no solo reforzaría su ataque, sino que también podría transformar el equilibrio de poder en Europa. Por su parte, el Manchester City tendría que replantear su estructura competitiva si pierde a su principal figura.
El próximo verano podría marcar un antes y un después en el fútbol europeo. La decisión de Haaland sobre su futuro podría convertirse en el traspaso más influyente de la década, cambiando el panorama y situando al PSG en el centro del foco internacional.