El Real Madrid prosigue con su trabajo en los despachos en cuanto a la planificación de la próxima temporada. El objetivo no es otro que el de reforzar el plantel de Carlo Ancelotti y, sobre todo, poner soluciones a los problemas que han ido surgiendo a lo largo de la campaña presente.
En este aspecto, entienden en el club, es fundamental fortalecer la línea defensiva del primer equipo, que se ha visto muy afectada por las diversas lesiones que han asolado al grupo. El último en la lista ha sido Lucas Vázquez, que tiene un problema muscular y ni siquiera ha viajado a Mánchester para el encuentro de esta noche frente al City (21 horas).
El Madrid, por esta razón, estudia el mercado y tiene pensado realizar contrataciones para la zaga en cuestión de meses. Trent Alexander-Arnold podría ser el primer fichaje para el verano, aunque Florentino Pérez ha estado dispuesto a incorporar al inglés en la pasada ventana invernal de traspasos. Sin embargo, el Liverpool no quiso ni oír hablar del asunto.

Y, mientras tanto, en Concha Espina también se mueven con respecto a los actuales operarios con los que cuenta Ancelotti. Uno de ellos es Raúl Asencio y, según ha adelantado ‘Marca’, su renovación es casi un hecho, aunque se abordará al final de la temporada.
Con 21 años, Asencio ha sido el ‘descubrimiento’ del curso. El canterano sustituyó a Éder Militao el pasado 9 de noviembre, en el encuentro de Liga frente a Osasuna en el Bernabéu (4-0), y, desde entonces, ha permanecido con los ‘mayores’. Su papel recobra más importancia si tenemos en cuenta la reciente lesión de Antonio Rüdiger.
Sin prisa
De acuerdo con la información que aporta el periodista José Félix Díaz en las páginas de ‘Marca’, tanto el Madrid como Asencio no tienen prisa por materializar el acuerdo de su renovación y ambas partes se sentarán al término de la campaña. El acuerdo se cerrará de manera rápida, según las fuentes consultadas por el diario de Unidad Editorial.

La renovación del contrato de Asencio se prolongará por cinco años más, por lo que el Madrid se garantizaría la presencia del canario para un largo tiempo, además de estipular su cláusula de rescisión en 50 millones de euros, para disuadir a futuros clubes de un posible interés.
