El Real Madrid apuesta por la innovación también en el área médica. Los servicios médicos del club han puesto en marcha un sistema de prevención y detección temprana de lesiones musculares basado en inteligencia artificial.
El objetivo es claro: reducir al mínimo las lesiones que tanto han afectado al equipo en temporadas anteriores. Solo en la 24-25, el club sufrió cerca de 40 lesiones musculares. La sobrecarga de partidos y la intensidad del fútbol moderno hacen imposible eliminarlas por completo. Pero la IA permite anticiparse a problemas antes de que aparezcan.

Hasta ahora, el club se apoyaba en GPS, pulsómetros y cuestionarios personalizados. Ahora, estos datos se combinan con nuevas métricas procesadas por la IA. El proyecto se implantará de forma definitiva en los próximos dos o tres meses.
Atención individualizada
La IA analiza cada jugador de manera individual. Detecta cambios en valores clave como el ángulo de fase (PhA), metabolitos en la orina o la carga de sprints. Cuando hay riesgo de lesión, envía una alerta inmediata al cuerpo médico. Así se pueden tomar decisiones de descanso o ajustar la carga de entrenamiento.
El sistema se basa en dos parámetros principales:
BIA sectorial
Esta técnica mide resistencia, reactancia y PhA. Permite identificar fatiga muscular oculta, inflamaciones o microlesiones. Incluso cambios mínimos en isquiotibiales, abductores o adductores son detectados. La IA interpreta estos datos y recomienda cuándo reducir esfuerzo para evitar lesiones.
Metabolómica
Analiza los metabolitos en sangre y orina. Revela la “huella química” del esfuerzo de cada jugador tras entrenamientos o partidos. Esto ayuda a conocer con precisión cómo responde el cuerpo a la carga física y detectar posibles riesgos antes de que se conviertan en lesiones.
La combinación de BIA sectorial y metabolómica, gestionada por la IA, permite actuar de forma preventiva. Si algún valor se sale de lo normal, el cuerpo médico decide limitar minutos en el campo o ajustar entrenamientos.

Se irá instalando en la cantera
El proyecto no se queda en el primer equipo. Se aplicará a todos los niveles del club, desde juveniles hasta profesionales. La meta del Real Madrid es clara: proteger a sus jugadores, optimizar su rendimiento y mantener la plantilla en las mejores condiciones posibles durante toda la temporada.
Con esta iniciativa, el club blanco vuelve a marcar la pauta en innovación médica deportiva, asegurando que cada jugador esté listo para competir al máximo nivel.