Florentino Pérez es conocido por su gran labor dentro de la presidencia del Real Madrid, pero tiene una afición desconocida que fue su profesión frustrada, a la que le hubiera encantado dedicarse. Pero por circunstancias de la vida, que le llevaron por otros derroteros, nunca pudo ser.
El cine, la profesión frustrada de Florentino Pérez
La muerte de su esposa Mari Ángeles en el año 2012 supuso un antes y un después para él. Algo que le hizo volcarse todavía más en su trabajo dentro del Real Madrid y en la presidencia de ACS, una de las mayores constructoras del mundo.
Es un misterio si ha decidido uno rehacer su vida, pero cuando se le preguntaba, su respuesta era que dedicaba todo el tiempo posible al trabajo y que sus ratos libres los pasaba con la familia y los amigos o con otra de sus grandes pasiones: viendo películas.
El cuartel general del barrio de República Argentina en Madrid y su barco el Pitina III, son sus dos grandes santuarios en donde se dedica a relajarse el cine es la afición más antigua del presidente del Real Madrid. Incluso se matriculó en la escuela de dirección de cine, aunque no llegó a terminar la carrera.
