El Real Madrid ha sacado ventaja ante el Atlético de Madrid en el partido de ida de los octavos de final de la Champions. Una genialidad de Brahim Diaz da ventaja de cara a a la vuelta del próximo miércoles en el Metropolitano.
El choque fue de momentos. Los dos equipos tuvieron sus fases de juego y un encuentro de tramos claramente diferenciables. El cuadro merengue empezó golpeando primero con un gran gol de Rodrygo Goes a pase de Fede Valverde. La noche no podía empezar mejor en clave madridista.
Te coge la espalda.
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Te tira la diagonal.
Te la clava en el ángulo.
Es un GOLAZO de Rodrygo.#UCL #LaCasaDelFútbol pic.twitter.com/qKiLZKWAwh
Este tanto perjudicó considerablemente a los rojiblancos, que estuvieron durante 20 minutos noqueados. El 2-0 podía llegar en cualquier momento y tal vez pudo hacerlo en una acción en la que Rodrygo caía dentro del área por agarrón de Javi Galán. Sin embargo, Clément Turpin no vio nada punible en esa acción. Pudo haber cambiado la eliminatoria por completo.
A medida que avanzaba el encuentro, el Atlético de Madrid iba avanzando líneas de manera considerable. Poco a poco asimilaba el 1-0 y en el minuto 32 Julián Álvarez puso el empate a uno. El gol fue de bella factura y está a la altura de lo gran futbolista que es. No hay duda.
Fue entonces cuando el dominio del vigente campeón de Europa empezó a diluirse de manera considerable. Sin embargo, los colchoneros tampoco fueron capaces de generar peligro contra la portería de Thibaut Courtois.
De más a menos
La segunda parte empezaría con el Atlético de Madrid bien plantado en campo contrario. No obstante, el vigente campeón de Europa fue de menos a más y un gran destello de Brahim Díaz supuso el 2-1.
El arte del engaño.
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La cintura de Brahim adelanta al Real Madrid.#UCL #LaCasaDelFútbol pic.twitter.com/rH6a2jwxec
Ancelotti decidió mover ficha y metió a Luka Modric, que hizo que el equipo tuviera mucho más control. Simeone, por su parte, demostraba con sus cambios que firmaba el resultado.
En los últimos compases del juego pudo caer el 3-1, pero Mbappé no estuvo fino a dar el último pase a Vinicius. En definitiva, está todo abierto para la vuelta y se dictará sentencia en el Metropolitano.