Eduardo Iturralde González alertó este viernes de una nueva chapuza en el renovado Comité Técnico de Árbitros (CTA) que la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) llevó a cabo hace unas semanas. El ex colegiado vasco especificó que un componente del nuevo equipo dirigente del colegio arbitral había incurrido en una incompatibilidad.
En concreto, Iturralde se refería a de Aitor Gorostegui Fernández-Ortega, que es el responsable arbitral de Segunda RFEF y, a su vez, también ejerce como colegiado del cuerpo específico del videoarbitraje. Algo que está terminantemente prohibido por el propio CTA, pero, según se ve, en la Federación de Rafael Louzán no lo detectó nadie.
‼️⚖️ Aitor Gorostegui renuncia a ser árbitro en activo de VAR y será el responsable arbitral de Segunda RFEF ante la incompatibilidad de ambos cargos
— El Larguero (@ellarguero) August 2, 2025
📌 Aitor Villate tampoco será el responsable de árbitros asistentes
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Pues bien, Aitor Gorostegui ha renunciado a ser árbitro en activo de VAR y será el responsable arbitral de Segunda RFEF ante la incompatibilidad de ambos cargos, según ha detallado la Cadena SER, que fue donde Iturralde, colaborador frecuente de la emisora de Prisa, anunció la exclusiva.
Más de lo mismo
En cualquier caso, lo más grave de esta ‘transformación’ es que no ha habido tal cosa y todo se limita a un cambio de cromos vergonzoso que no se atreve a tocar de raíz el problema del fútbol español: cualquier sombra de Enríquez Negreira ensuciará por completo -y siempre- cualquier partido.
Claro que en este país nuestro que tenemos tan particular sólo el Madrid ha levantado la voz, personándose en la causa del ‘caso Negreira’. Según se mira, la gente sabe quejarse cuando los de en frente visten de blanco…