El primer Clásico de Xabi Alonso como entrenador del Real Madrid llega con ilusión… y con dilemas. El técnico afronta su gran estreno ante el Barcelona con varias incógnitas en la defensa, especialmente en el lateral derecho, donde las lesiones han alterado todos los planes.
En Valdebebas hay cierto optimismo con la recuperación de Trent Alexander-Arnold y Dani Carvajal. Ambos han dado un paso adelante esta semana y podrían recibir el alta médica antes del partido. El problema es el mismo para los dos: ninguno ha jugado desde septiembre.
Xabi Alonso deberá decidir si arriesgar con alguno o mantenerlos al margen hasta que estén al cien por cien. La carga física del Clásico, con un ritmo alto y duelos constantes, podría ser demasiado exigente para quien lleva tanto tiempo fuera.
El cuerpo técnico lo tiene claro: solo jugarán si las pruebas finales confirman que no hay riesgo de recaída. En caso contrario, no habrá experimentos.
El “nuevo” lateral Valverde
Y ahí entra en escena Federico Valverde. El uruguayo ha sorprendido a todos actuando como lateral derecho en los dos últimos partidos de LaLiga. Lo hizo tras unas polémicas declaraciones en las que reconoció que “no se veía jugando en esa posición”. Sin embargo, su rendimiento ha sido notablemente alto.
Valverde aporta físico, velocidad y una intensidad que encajan perfectamente en el plan de Xabi Alonso. Además, su capacidad para incorporarse al ataque ha dado equilibrio al equipo. Por eso, si ni Trent ni Carvajal están listos, el uruguayo volverá a ocupar el carril.
Xabi Alonso, ante su primera gran decisión
El técnico afronta su primer Clásico con el reto de mantener la solidez defensiva y la presión alta que caracteriza a su equipo. Enfrente tendrá a un Barcelona imprevisible, con Lamine Yamal y Raphinha como principales amenazas por las bandas.
La duda en el lateral derecho es, por tanto, una cuestión clave. ¿Arriesgará Alonso con un regreso prematuro o apostará por la continuidad de Valverde? Sea cual sea su elección, el técnico ya ha demostrado algo importante: este Madrid tiene alternativas y carácter para competirle a cualquiera.