En El Chiringuito hay dos formas de analizar la actuación de un futbolista en un partido, o se le eleva a los cielos o se le hunde en el infierno. Con Leo Messi ha pasado lo primero tras la victoria con México y lo segundo con la derrota ante Arabia Saudí.
Buyo media con lógica
Muchos argentinos compartían en el día de ayer muchas imágenes de Messi celebrando la victoria ante México, hasta ahí todo normal. Pero Paco Buyo quiso ser claro, Messi está muy lejos de su mejor nivel, algo que pareció no gustar a muchos de sus compañeros.
Toda la bancada pro Messi se movilizó en contra de Buyo que lo único que hizo fue describir una realidad. Esta no es otra que explicar que Messi marcó un gol en un partido con más sombras que luces tanto a nivel individual como en el plano colectivo.
Argentina no juega a nada
Messi no hizo el partido que muchos imaginaron en su cabeza. Estuvo más bien normalito, eso sí, marcó un gol que a la larga se mostró determinante pues fue el encargado de abrir la lata. Pese a ello, Argentina no jugó bien y Messi salvo por el gol no hizo jugar a su equipo.
Objetivo cumplido
El equipo de Scaloni sembró muchas dudas en el primer partido y en el segundo aguantó el tipo contra una México muy pobre. Ahora se las tendrá que ver con Polonia si quiere estar en la ronda de octavos. O Messi mejora o el equipo se verá con dificultades. Los de Scaloni no brillan en lo colectivo.