Para descubrir esta incógnita, debemos remontarnos a la máquina del tiempo hasta el 1958. El jugador en cuestión era Waldir Pereira, alias “Didí”. Así era conocido este jugador que vistió la elástica blanca junto a Puskas o Di Stéfano.
Este brasileño fue el responsable de maravillar al mundo al mismo tiempo con Brasil, acompañado de futbolistas de la talla de: Garrincha o Pelé, cuando levantaron la Copa del Mundo de ese mismo año.
En aquel Mundial, más allá de esas dos figuras, este perfil era un atrevido jugador que practicaba un fútbol vertical, y el responsable de llevar la batuta de su equipo. Conocido como uno de los primeros volantes en un terreno de juego, tenía capacidad para conectar a sus compañeros tanto en tareas defensivas como ofensivas.
Las cualidades del jugador brasileño
No destacaba por su físico o velocidad, pero el tipo tenía una gran visión de juego. Aquel jugador veía espacios dónde nadie más lo hacía. Sus registros alcanzaron ser prácticamente los de un delantero centro. En su palmarés consiguió cerca de 113 goles en sus 313 partidos como profesional.
El brasileño, aterrizó en el Bernabéu al año siguiente de ganar la Copa del Mundo. Su presidente quería poner esa guinda al pastel a un proyecto demoledor. A pesar de venir a una edad tardía, tenía 30 años entonces, a ese mago todavía le quedaban muchas cosas por hacer. Pagaron por él cerca de los 80.000 dólares. Una cifra realmente merecida por las cualidades de ese jugador.
Pero aquello tan solo fue un destello de luz. A pesar de empezar con muy buen pie su aventura madridista, el atacante se fue diluyendo poco a poco. Sus números lamentablemente fueron algo escasos: 6 goles en 19 partidos.
El rendimiento de Didí en el Real Madrid
Unos datos muy inferiores a su rendimiento. Además de su poco acierto debido a una difícil adaptación, el jugador pecó de egoísta y egocéntrico no priorizando los roles en el vestuario. Este nunca quiso aceptar el liderazgo de su compañero Alfredo Di Stéfano, con el que tuvo sus más y sus menos.
Para que la situación no fuera a peor, el mismo Santiago Bernabéu, le puso de vuelta a Brasil dónde aún tenía rédito para recuperar la inversión gastada. Didí puso rumbo al Botafogo, y allí se esfumó su talento y nunca más se supo de él.
Un precedente que marcó un hito para el club de Chamartín. A día de hoy son muchos los jugadores de color que han pasado por las filas del Real Madrid, a cada cuál más bueno y talentoso que aquel Waldir Pereira, alias, “Didí”.