La final de Copa estuvo llena de tensión desde un día antes de que sonase el pitido inicial. La rueda de prensa de los árbitros amenazando al Real Madrid no sentó nada bien. Incluso sobrevoló la amenaza de suspensión del Clásico, pero finalmente eso no sucedió.
Aunque estaba claro que los colegiados iban a ser analizados el milímetro en cada decisión. De Burgos Bengoetxea optó por un arbitraje permisivo que en muchas ocasiones lo fue más con el Barça. Quizás eso llevó a Rüdiger a perder la cabeza en los minutos finales.

Estando ya en el banquillo no gustó nada una decisión del colegiado, una falta que no señaló pero al revés sí lo había hecho. Eso llevó a la reacción de Rüdiger, algo que le puede costar muy caro. Y es que podrían caerle de 4 a 12 partidos al central alemán después de lo sucedido en el Clásico.
Ya no solo por las protestas, sino porque le lanzó un hielo al colegiado y tuvo que ser sujetado por varios compañeros y miembros del cuerpo técnico. Eso le haría no estar en el tramo final de la temporada, ya que cumpliría la sanción en Liga, e incluso podría arrastrarla para el curso que viene.
De Burgos reflejó en el acta lo sucedido con Rüdiger
La sanción va a ser dura para Rüdiger, sobre todo porque De Burgos reflejó todo lo sucedido en el acta. Indicó que le expulsó “por lanzar un objeto desde el área técnica sin llegar a alcanzarme. Tras ser enseñada la tarjeta roja, tuvo que ser sujetado por varios miembros del cuerpo técnico, mostrando una actitud agresiva”.

Con una redacción del acta así, Rüdiger se expone a una sanción bastante dura. Eso obligará a Ancelotti a alinear en el tramo final de Liga a Alaba o Tchouaméni para formar pareja con Asencio. El alemán podrá descansar ya que hasta el Mundial de Clubes todo apunta que no le volveremos a ver.
En el Real Madrid ya esperan que desde la Federación confirmen la sanción que le cae a Rüdiger. No esperan que sean benevolentes por lo que serán un mínimo de 4 partidos. Sanción que cumplirá también en Liga a pesar de ser torneos distintos.