Mala noche para los equipos grandes. Bayern, Real Madrid o PSG perdían sus respectivos partidos de liga y eso provocaba un gran descalabro en sus respectivas clasificaciones domésticas.
En Alemania, los bávaros perdían el liderato y en Francia, el PSG dejaba escapar otros tres puntos concediendo así su cuarta derrota del curso. En la Liga, el Real Madrid dejaba escapar una clara oportunidad para sorprender al Barça, pero entre el VAR y el árbitro tampoco lo han permitido.
La situación que ha sufrido Al-Khelaifi
El fútbol está cambiando y ahora cualquiera se atreve a amenazar a estos colosos. Aunque visto el balance que se puede sacar de todo esto, el PSG podría ser el más perjudicado de todos, visto que se le acaba el ciclo dorado en el que creían.
Posiblemente, este curso con Galtier en el banquillo, es uno de los peores que se recuerdan desde la llegada de Al-Khelaifi al Parque de los Príncipes. Estos perdían nuevamente en la Ligue 1, tras el fuerte mazazo de la eliminación en Champions precisamente ante el Bayern.
No son buenos tiempos en París, en los que asumen que algo hay que cambiar. Con Mbappé, posiblemente, haciéndose las maletas para llegar al Real Madrid, un Neymar lesionado y un Messi ausente, este equipo está repleto de una mediocridad algo evidente.
La crisis que atraviesa el PSG
No ganan, no convencen y tampoco asustan. Los millones invertidos en un proyecto que parece más una jaula de oro, se atascan y estos son el ridículo de su país.
Si hace unos días veíamos salir a Al-Khelaifi salir del Allianz Arena fuertemente enfadado y con cara de pocos amigos, su rostro de hoy era prácticamente idéntico, tal y como nos desvelaban las cámaras.
El presidente habría bajado a los vestuarios a charlar con los suyos tras el encuentro. Molesto por la poca implicación que han ofrecido durante los noventa minutos ante su público, este buscaba respuestas y responsables.
Las consecuencias que sucederán
El entrenador francés tiene los días contados al igual que muchos otros jugadores que no cuentan con el nivel suficiente. A este PSG se le empiezan a ver las costuras de un conjunto que hace aguas cada vez que le aprietan un poco las tuercas.
Estos han sido incapaces de meterle mano al quinto clasificado con el que se llevan casi dieciséis puntos de ventaja. Al-Khelaifi puede tomar decisiones inmediatas. Veremos de qué es capaz de hacer.