El Barcelona, obligado a pagar más de 100 ‘kilos’ antes de final de temporada

Los problemas económicos se le siguen acumulando al Barcelona de Joan Laporta

Ricardo Sánchez
31 de Octubre de 2025 a las 21:45
El Barcelona, obligado a pagar más de 100 ‘kilos’ antes de final de temporada
El Barcelona, obligado a pagar más de 100 ‘kilos’ antes de final de temporada

El Barcelona está viviendo una situación verdaderamente alarmante, condicionado todo por ser un año de elecciones.

En los últimos días, Joan Laporta aseguró que "me gusta ser presidente del Barça, me gusta lo que hago, pero hay mucha gente que lo puede ser y que lo haría bien. Quiero al Barça y cuando ha habido momentos difíciles me he sentido llamado a intentar arreglar una situación. Siempre quiero que los barcelonistas estén contentos. Un presidente del Barça debe ser responsable, debe decir siempre la verdad porque el Barça solo tiene una palabra".

Estas palabras del actual presidente culé en '3Cat' dejan clara su idea de presentarse a las elecciones y su opinión de que todo está mejor que en el momento que asumió la presidencia.

Un pago cuesta arriba

Sin embargo, la sensación que tienen los azulgranas es muy diferente, ya que las dificultades para fichar cada vez son más, por no hablar del tema de la inscripción de futbolistas, aunque esto no es todo.

En las últimas horas, las informaciones sobre deudas ha estado en la boca de todo, ya que el Barcelona debe pagar 123 millones de euros a Goldman Sachs antes del 30 de junio de 2026, siendo esto un problema muy serio.

Laporta aplaudiendo en público
Laporta aplaudiendo en público

La entidad catalana deberá afrontar los primeros intereses devengados por el crédito del Espai Barça y un nuevo plazo del préstamo concedido por el banco de inversión norteamericano en el año 2021.

Un conflicto añadido que tiene este pago es que las elecciones del Barcelona se podrían realizar en el segundo semestre del 2026, por lo que el nuevo presidente, en caso de que Joan Laporta no continúe en el cargo, deberá comerse el marrón de pedir una prórroga, ya que la tesorería de los culés, como es de esperarse, no pasa por su mejor momento.