La temporada del Real Madrid ha sido excepcional y el club está de enhorabuena por todo lo conseguido. Aunque la temporada también ha dado para valorar a los más destacados. Las sensaciones han sido excepcionales y si se debe premiar a alguien hay un nombre que destaca por encima del resto: David Alaba.
El austríaco recién llegado el verano pasado, se ha instaurado en el equipo de una forma brillante. Su figura ha hecho olvidar a jugadores como Ramos o Varane y desde el primer momento ya se puso el reto de heredar el mítico dorsal del camero. La realidad es que ya nadie se acuerda de aquello y con lo mucho que ha hecho se ha ganado a la afición.
Ahora mismo, el austríaco está de enhorabuena con nada menos que la celebración de su cumpleaños. Sus 30 tacos. Se ha convertido en uno de los veteranos de la plantillo y todo el mundo le respeta como si llevara toda la vida de blanco.
Su trayectoria ha sido impoluta, pasando por grandes equipos como el Bayern de Munich en Alemania y ahora consolidándose en el equipo merengue.
Los detalles de su cumpleaños
Pero si hay algo que nos ha sorprendido a todos es su exitosa fiesta de cumpleaños que se ha marcado. En plenas vacaciones, sin compromisos deportivos de por medio y eliminado del mundial de Qatar con su selección, ha decidido organizar una fiesta por todo lo alto.
Lo ha hecho en el club Da Rose uno de los clubes más exclusivos de Austria. Vestido con una elegancia muy sutil, acompañado de su mujer y sus íntimos amigos, pudieron celebrar el gran día especial. Su mujer Shalimaar le dedicó unas palabras muy especiales en redes y pasó un día excelente.
Música en directo, fiesta privada, agradecimientos y una buena cena acompañada con perfectos platos. Durante la temporada hemos visto visto como se las gasta a lo largo de la temporada: silla abajo, silla arriba.
Amor a primera vista entre Alaba y el Real Madrid
Ya es todo un especialista en esta faceta y la parroquia blanca le tiene mucho cariño por el trato que ha tenido con ellos. En el vestuario hay un nuevo líder, y con un español aprendido de forma exprés, es un animador nato.
Se han juntado el hambre y las ganas de comer. Sino ha habido valiente que le haya aguantado un baile sobre el verde, seguramente tampoco lo hubo en la pista de baile. Su fútbol implacable le ha colocado como uno de los mejores jugadores con un mayor estado de forma.
Por jerarquía es uno de los que más cobra en la plantilla, pero no es algo que ostente. Siempre discreto, trabajador y aplicado en todo lo que hace. A quiénes tampoco vimos fueron a sus amigos compañeros de equipo. Parece que no habría invitado a ninguno, pero ya se encargarán en Valdebebas de felicitarle fuertemente.
En este caso es un jugador algo más reservado que el resto y ha conseguido mantenerlo, por ejemplo con su familia. A quién no hemos visto en esa celebración fueron a sus dos hijos que tienen en común el matrimonio. Siempre ha querido mantener su vida privada algo al margen de toda polémica o vista al público.
Alaba le ha puesto su toque de personalidad al vestuario
Pero cuando se habla de las fiestas en el vestuario, los honores le han señalado a él, el líder del grupo en esta faceta. Le deseamos que cumpla muchos más y lo siga haciendo en el Real Madrid. Ha llegado para quedarse y consolidarse como un referente en su posición.
La llegada de Rüdiger puede desplazarle al carril izquierdo, pero eso no debería amenazar su condición de titular. Se merece jugar todo lo que el desee. El austríaco siempre lo ha dado todo por el equipo. Su efectividad en el verde le ha convertido en uno de los hombres de confianza para Ancelotti.
Es su hombre de confianza. Todo lo que ordena el italiano desde su área técnica, es plasmado y traducido por el central. Su estatus pide a gritos el brazalete de capitán aunque ni él no lo necesite. Méritos propios los que le han catapultado al éxito.