El Balón de Oro se entregó la pasada semana en París, en el Teatro del Châtelet, y, al contrario que el año pasado, no hubo sorpresa: Ousmane Dembélé ganó por goleada en un podio que completaron Lamine Yamal y Vitinha. La gala fue un paseo del PSG, que desde el año pasado ha conseguido cinco títulos y puede aún levantar la Copa Intercontinental en diciembre.
Todo ello se vio ratificado este miércoles en Montjuic. El PSG visitó al Barcelona y, a pesar de que los culés se adelantaron con un gol de Ferran Torres, los de Luis Enrique remontaron con tantos de Senny Mayulu, que empató antes del descanso, y Gonçalo Ramos, que marcó en el minuto 90 el tanto de la victoria de los galos.
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El encuentro en Barcelona dejó muy a las claras por qué el PSG se llevó la ‘Orejona’ el pasado curso y cómo, a pesar de contar con numerosas bajas -jugó sin su ataque titular-, acabó ahogando a los culés y se llevaron el triunfo de manera merecida. Como justo fue también el Balón de Oro de Dembélé, de lo que se ha acordado ‘L’Équipe’, que en la edición de este jueves manda un dardo a Lamine Yamal.
“Balones de Oro”, titula la portada en papel el diario francés, que forma parte del Grupo Amaury, editor también de ‘France Football’, que es la revista encargada de entregar el galardón. En la fotografía, en el medio, aparece Vitinha, en lo que es un mensaje subliminal para el barcelonismo, que durante los últimas días se ha indignado después de que Yamal se quedara compuesto y sin novia.
Yamal, lejos de su mejor versión
El partido de Lamine Yamal fue de más a menos y así lo ve ‘L’Équipe’ que, aunque le salva y le otorga un 5 de puntuación, retrata a la perfección al extremo del Barça: “Apenas después de volver de una lesión, el crack fue titular. En la primera mitad, cada vez que tocaba el balón, hizo vibrar a todos con sus regates y pases, protagonizando un gran duelo con Nuno Mendes. Pero no estaba al 100 % y decayó tras el descanso, sin haber sido decisivo antes”.

Además, el periódico galo subraya a Nuno Mendes como “el rey de Mojtuic”. El lateral, encargado de marcar a Lamine durante el partido, firmó una grandísima labor que fue alabada luego por el mismo Luis Enrique. Además, sufrió una entrada feísima de Frenkie De Jong por la que el holandés debió haber sido expulsado en el minuto 32.