La dura historia de Magda, madre de Casemiro: su vida no ha sido un camino de rosas

El jugador brasileño y su madre llevaron una vida muy dura y sacrificada

21 de Abril de 2022
Casemiro en un partido con el Real Madrid
Casemiro en un partido con el Real Madrid

Casemiro será recordado por los madridistas como un jugador legendario, que consiguió, junto a Luka Modric y Toni Kroos, ser el único centro del campo en ganar 3 Ligas de Campeones de manera consecutiva. Además, es un jugador súper querido por el vestuario y por los aficionados del Real Madrid.

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Modric, Kroos y Casemiro han formado un tridente histórico en el Real Madrid

Sin embargo, la vida del futbolista brasileño no siempre fue fácil y feliz. Todo lo contrario, tuvo que soportar historias muy difíciles de afrontar y superar. Su padre abandonó a su familia cuando solo tenía 3 años. Su madre, Magda, tuvo que encargarse sola de criarle junto a su hermano y su hermana (Lucas y Blanca). Sacó fuerzas desde lo más dentro que puede tener una persona que necesita sacar adelante a sus hijos.

Casemiro, junto a sus hermanos y su madre, vivían en una pequeña y humilde casa de un barrio pobre de Sao José Dos Campos, a 94 kilómetros de Sao Paulo. Magda se tenía que ir a trabajar para poder sacar adelante a su familia y Casemiro se encargaba de cuidar de sus hermanos pequeños y calentarles la comida que dejaba hecha su madre antes de irse.

 

Su madre, el espejo en el que se mira.

El futbolista del Real Madrid tuvo que renunciar a gran parte de su infancia y hacerse adulto para salir adelante y ayudar a su madre, la que dice ser su gran apoyo y el espejo en el que se fija. 

“Pienso mucho en ella. Trabajaba todos los días de la semana en todas las casas que podía como empleada del hogar. Yo iba a jugar al fútbol solo porque mi madre siempre estaba trabajando”, contaba muy emocionado Casemiro en una entrevista en la Cadena SER.

Confesaba que su vida fue muy complicada durante esos años. Eran cuatro en una casa que solo tenía una habitación. Cuando cobró su primer sueldo, lo aprovechó para comprarle una casa a su madre. “Ella pensaba que yo jugaba para divertirme, pero yo tenía muy claro que yo quería ayudarla y el mejor camino para hacerlo era el fútbol”.

Un tremendo sacrificio el que hicieron él y su madre, pero que sirvió para que Casemiro se convirtiera en una estrella del fútbol y sacar de la pobreza a su familia, y poder darle una vida mucho mejor a su madre, su inspiración y la razón por la que se hizo futbolista.

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