Un juzgado de la capital de España ha admitido que el VAR no actuó como debería en dos partidos de la temporada pasada al omitir imágenes que podrían haber causado otro tipo de decisiones.
Concretamente son dos partidos los analizados y en uno de ellos el Real Madrid se vio fuertemente perjudicado. Se trata del partido de la pasada temporada entre el Valencia y el Real Madrid en el que Vinicius Junior fue expulsado tras ser agredido e insultado con gritos y gestos racistas por algunos aficionados valencianistas.
Lo que se juzgó en este caso no fue el lamentable hecho racista sino la acción en la que Vini fue expulsado por dar un manotazo a un jugador del Valencia. El colegiado no lo vio, pero fue avisado por el VAR para posteriormente expulsar al brasileño.
"Imágenes sesgadas"
La sentencia judicial hace referencia a la censura de algunas de las imágenes del VAR, las que propiciaron la expulsión de Vinicius, ya que desde el VAR solo mostraron la agresión del jugador del Real Madrid. Sin embargo, el VAR no avisó al colegiado de la agresión previa que había sufrido Vinicius.
Y esa acción es clave para entender el empujón de Vinicius en su intento de liberarse, lo que es visto como una defensa de la agresión previa recibida: "Las imágenes fueron sesgadas por el asistente del VAR", es decir, por Iglesias Villanueva.
Toda esta polémica vino después de que no renovaran la participación en las dos últimas jornadas de estos árbitros. El Juzgado toma partida tras desestimar las demandas presentadas por Xavier Estrada y seis árbitros de VAR a los que no se renovó contrato y no fueron designados para las dos últimas jornadas. El motivo estaba más que justificado.
Una sentencia judicial confirma lo que muchos dijimos con la expulsión de Vinicius, que el VAR escamoteó imágenes. Y por esto JUSTAMENTE se le quitó la roja. https://t.co/A7YxbkKdRc pic.twitter.com/VFNjpV8LWA
— Bruce Wayne (@elmozo7) December 13, 2023
El otro partido que sufrió el mismo fallo fue el del Atlético de Madrid-Espanyol por aquel famoso gol fantasma y que le costó el descenso al club catalán. Esta sentencia refleja que el VAR no se está utilizando como se debería, algo que ha sido palpable durante este curso donde muchos árbitros y jugadores no esconden su descontento con esta tecnología que iba a resolver muchos problemas, al menos, esa era la intención.