El Real Madrid continúa con un alto ritmo de trabajo en las oficinas de Concha Espina y, después de cerrar la primera incorporación de la siguiente temporada (Trent Alexander-Arnold) y atar la renovación de Vinicius Junior, en el club se han propuesto abordar otro melón: el de la portería.
Tanto Florentino Pérez como sus dos hombres de confianza en el club, José Ángel Sánchez y Juni Calafat, son conscientes de que, como rezaba la máxima de Helenio Herrera, los buenos equipos se empiezan a armar desde atrás y por eso no quieren sorpresas con los arqueros.
En el club están muy satisfechos con el trabajo de Thibaut Courtois, pero también con el de Andriy Lunin. El ucraniano realizó una temporada pasada espectacular, siendo un muy buen sustituto de su compañero, al lesionarse éste, y el Madrid decidió renovarle hasta 2030.

La renovación de Lunin llegaba el verano pasado después de un capítulo de rumores que le situaban lejos del Santiago Bernabéu y como señal inequívoca de la confianza que tiene el club en él, tan es así que el objetivo, al prolongarle de manera tan extensa su nuevo contrato, es que siga muchos años en el Madrid.
Lunin llegó al Real Madrid en 2018, con sólo 19 años, y forma parte del primer equipo desde 2020 después de una etapa de cesiones entre el Leganés, el Valladolid y el Oviedo. Ya son cinco temporadas desde que está con los ‘mayores’, algo que le ha ayudado a ser últimamente el meta titular de la Selección ucraniana.
No hay interés en sustitutos
El Madrid considera que Courtois, cuyo contrato expira en 2026, y Lunin son el presente y el futuro del club y ésa es una razón por la cual el club no ha decidido presentar ninguna oferta por hacerse con los servicios de un guardameta.

La Cadena COPE informaba al respecto recientemente que desde el Santiago Bernabéu no habían realizado ningún movimiento para fichar a Joan García, el joven cancerbero del Espanyol que gusta, aunque el deseo del Madrid es la continuidad de Lunin.