Semana movida en las oficinas del Real Madrid. Adam Wharton, centrocampista inglés de 21 años, vuelve a estar en el punto de mira. El Crystal Palace ya ha fijado su precio de salida: 70 millones de libras, unos 82 millones de euros al cambio actual.
Una cifra que ha hecho levantar más de una ceja en Valdebebas. Según ha podido saber Defensa Central, desde el club blanco lo tienen claro: “Vamos a negociar”. No están dispuestos a pagar esa cantidad por un futbolista que, pese a su talento, todavía no ha jugado en competiciones europeas.

Wharton lleva apenas una temporada y media en el Palace, pero ha revolucionado el juego del equipo. Desde su llegada en 2024 procedente del Blackburn por 21 millones, su crecimiento ha sido meteórico. Oliver Glasner lo considera intocable en el once.
Su estilo, mezcla de pausa y visión de juego, ha despertado comparaciones con Modric y Kroos. No es casualidad que el Real Madrid lo siga desde hace meses. Xabi Alonso lo tiene en la lista de futuribles para reforzar el mediocampo la próxima temporada.
El Real Madrid no quiere repetir errores
En Chamartín lo miran con interés, pero también con cautela. La dirección deportiva considera que el precio es “fuera de mercado”. En palabras de una fuente interna, “no vamos a entrar en una puja descontrolada”.
El plan pasa por tantear al jugador y esperar. Si Wharton mantiene su nivel, podría llegar en 2026, cuando su valor se estabilice o el Palace esté dispuesto a negociar a la baja.

Competencia inglesa y futuro en el aire
El Manchester United también está detrás del joven talento. En Inglaterra se habla de una oferta de 60 millones de libras para el próximo verano. Sin embargo, el presidente del Palace, Steve Parish, no tiene intención de vender: “Adam quiere seguir con nosotros. Está centrado y feliz aquí”, afirmó en talkSPORT.
El Real Madrid no pierde de vista el caso. Wharton gusta, y mucho. Pero los blancos no quieren repetir operaciones infladas. Si el Palace no baja el precio, el club madridista tiene clara su postura: esperar y negociar con calma.