El Paris Saint-Germain aplastó el pasado sábado al Inter de Milán en la final de la Champions League con un contundente 5-0 en el Allianz Arena de Múnich, dominando de principio a fin a los italianos bajo la dirección de un Luis Enrique que sumó su segunda Copa de Europa como técnico.
Aunque muchos centraron su atención en Ousmane Dembélé, el exjugador del FC Barcelona tuvo una actuación más discreta de lo habitual. En cambio, quien realmente destacó fue Désiré Doué, autor de dos goles, una asistencia y reconocido como el mejor jugador de la final de la UEFA Champions League.

EL REAL MADRID, PENDIENTE DEL NIVEL DE DÉSIRÉ DOUÉ
Como era previsible, esta actuación del joven delantero francés no ha pasado desapercibida en el Real Madrid, club que lamenta ver semejante exhibición del jugador.
Juni Calafat, jefe de los ojeadores del Real Madrid, consideraba al futbolista galo como una promesa muy atractiva para el futuro y lo valoraba incluso como un posible reemplazo para Rodrygo Goes. Sin embargo, el Paris Saint-Germain, aprovechando que se trata de un futbolista francés de la Ligue 1, actuó rápido para firmar su contratación desde el Rennes.
SU SALIDA DE PARÍS SE COMPLICA TRAS LA GRAN FINAL
El inconveniente radica en que, tras su brillante actuación en la final de la Champions League, desde el Real Madrid consideran que será prácticamente imposible que el jugador abandone París. Por ello, se descarta la posibilidad de ficharlo, incluso si Rodrygo Goes saliera este año o en 2026, ya que su desempeño en Múnich lo ha consolidado como una pieza clave e indiscutible para el equipo francés.
Actualmente, Désiré Doué tiene un valor de mercado estimado en 60 millones de euros, pero tras la temporada que acaba de firmar, su cotización se disparará, lo que hará muy complicado que Florentino Pérez o José Ángel Sánchez puedan acometer su fichaje, aunque mantienen una alta valoración del jugador galo. De hecho, se estima que su fichaje podría rondar los 100/120 millones de euros.

Désiré Doué asumió con gran responsabilidad el reto de llevar al Paris Saint-Germain a su primera Champions League y demostró estar a la altura, tirando del equipo en los momentos clave. Fue decisivo no solo en ataque, sino también aportando un gran esfuerzo defensivo durante todo el partido.