Parece que los deseos se desvanecen por sí solos. Uno de los jugadores más destacados del último Mundial, Gvardiol, ha tirado por los suelos numerosas ilusiones de madridistas que tenían la fe y confianza que el central croata y compañero de Modric pudiera acabar en el Real Madrid.
Las declaraciones de Gvardiol que dañan al madridismo
Por sí solo ha salido de su boca que su único deseo es el de jugar en el Liverpool. Esto lo hacía público en un programa de televisión balcánico, en RTL Danas. Explicaba entonces que siempre ha sido un gran aficionado del conjunto red, enamorado de su filosofía de club y de trabajo así como los títulos conquistados.
Aseguraba que era una de sus grandes distracciones que tenía con su padre cuando este era un chaval. El jugador de 20 años ha sido una de las grandes sorpresas que nos ha regalado el fútbol en estos últimos meses y puede ser el culebrón del verano una vez finalizada la presente temporada.
Posiblemente le salgan muchas novias, pero este ya ha dejado claras sus preferencias. En el Real Madrid gustaba como refuerzo pero era una posición más que poblada. Con la destreza de jugadores como: Rüdiger, Alaba, Militao, Nacho o Vallejo son muchos los jugadores para esas dos plazas.
El futuro del jugador en el aire
Por tanto, al fin y al cabo, es una noticia que no preocupa tanto. Sin ir más lejos, no era una prioridad clara del madridismo. El tiempo y los millones decidirán dónde acaba el jugador.
Actualmente, milita en el Leizpig, y a pesar de vincularse con ellos hasta 2027, veremos dónde termine. Aun le queda mucho por cumplir al futbolista.