Vinícius Júnior ha querido dar un paso al frente. El brasileño llegó este miércoles temprano a Valdebebas, saludó uno a uno a sus compañeros y pidió perdón por su actitud en El Clásico. Fue una conversación breve, directa y sincera. Reconoció que se equivocó al reaccionar de forma tan airada cuando Xabi Alonso decidió sustituirle en el minuto 73 del partido ante el Barcelona.
Sin embargo, hay un detalle que no ha pasado desapercibido. En su comunicado público, Vinícius pidió disculpas “a mis compañeros, a mi club y a mi presidente”, pero en ningún momento mencionó al entrenador. Ni en persona, ni en redes sociales.
Hoy quiero pedir disculpas a todos los madridistas por mi reacción al ser sustituido en el Clásico.
— Vini Jr. (@vinijr) October 29, 2025
Así como ya lo he hecho en persona durante el entrenamiento de hoy, también quiero pedir disculpas nuevamente a mis compañeros, club y presidente.
A veces la pasión me gana por…
Un gesto que genera ruido
Según cuentan desde dentro del vestuario, el técnico no estaba presente en esa charla. Xabi y su cuerpo técnico se incorporaron al entrenamiento unos minutos después, y no consta que entre ambos haya habido una conversación privada. En el club intentan restarle importancia, pero el gesto ha generado cierto runrún.
El enfado de Vinícius venía de antes. No solo por el cambio, sino porque siente que ha perdido protagonismo en las últimas semanas. El brasileño, que vive del impulso y la emoción, no llevó bien ver su dorsal en la tablilla de los cambios. “¿Yo? No es posible. Yo me voy del equipo”, llegó a decir visiblemente molesto.

Xabi Alonso evita la polémica
Xabi, por su parte, optó por no alimentar el tema. En rueda de prensa fue claro y elegante: “Son cosas que hablaremos dentro del vestuario. Vinícius ha hecho un buen partido y nos ha dado mucho. Me quedo con lo positivo”.
El técnico entiende la personalidad de su jugador, aunque sabe que deberá gestionarla con tacto. En el Real Madrid nadie duda del compromiso de Vinícius, pero sí esperan más templanza en momentos de tensión.
El Clásico acabó con victoria blanca por 2-1 y con Vini participando en la jugada del gol decisivo de Bellingham. Pero la escena de su enfado sigue dando que hablar. En Valdebebas, todos esperan que el brasileño y Xabi hablen cara a cara y cierren el episodio cuanto antes. Porque, como dicen dentro del vestuario, “cuando Vini está feliz, el Madrid es otra cosa”.