En otro espectáculo de Vinicius sobre el verde, su actuación no pasaba desapercibida por nadie y es que el chico sigue intratable. Posiblemente, sea el jugador más en forma del momento. Su desequilibrio es el que decide partidos y resultados y ayer lo volvía a hacer con una acrobática asistencia a Karim Benzema.
Volvió loco a Reece James y sus ataques eran un continuo puñal por esa banda izquierda. Con estas, no hace falta pensar en Mbappé o compañía y es que teniendo al chaval así de enchufado, el Real Madrid puede respirar tranquilo.
La ilusión por Vinicius
Con el “20” a la espalda, este, nos sigue ilusionando y a pesar que el chico tiene ya mucho mercado, algunos sectores invitan a pensar que su marca personal sería mucho más potente con otra estrategia y eso pasa por cambiarse de dorsal.
Muchos le piden que es hora de cambiárselo y todas las quinielas apuntan que debe ser el nuevo heredero del mítico “7”. En el club blanco, este dorsal tiene un significado especial, visto que lo han llevado numerosas estrellas a lo largo de su historia.
De hecho, está reservado para los jugadores diferenciales. En su día ya lo lució: Butragueño, Raúl o Cristiano, pero desde la salida del portugués parece que no ha tenido mucho peso en el vestuario. Sin embargo, los resultados no han sido malos así que no es cosa de superstición.
Ligado a este hilo, esta curiosidad era motivo de pregunta en zona mixta, pero el delantero brasileño hablaba con propiedad y se despreocupaba de todos estos detalles, para él, insignificantes.
La reflexión de Vinicius
Lo hacía con sutileza y elegancia, demostrando que es un tipo maduro y comprometido con lo que más prevalece: hacer campeón a este equipo.
“No lo sé, la verdad es que no lo he pensado. Siempre pienso en hacer las cosas bien y el número de la camiseta la verdad es que no me importa mucho", señaló el delantero carioca, mientras le proponían esa probabilidad de cara al curso que viene. Dejó incluso mudo al periodista.
A efectos prácticos, ha cumplido con todos los méritos necesarios de modo que, no debería tener oposición salvo que un jugador con más antigüedad se lo apropie. A lo largo de toda su carrera, siempre ha lucido números altos -de dos cifras-.
Además, no ha sido partidario de realizar muchos cambios y ha optado por lucir los mismos. En Flamengo ya escogió el dorsal 20, cosa que cuándo llegó al Real Madrid no pudo hacer.
El historial de dorsales del jugador
En el Castilla empezó con el 11, pero una vez ya empezó a subir al primer equipo, este lo tuvo que modificar por el 28 o 25, hasta volver a bajar al 20. Esa elección parece ser que la tomó, visto que fue el número con el que debutó en Brasil como profesional. Con este lleva ya tres temporadas, exactamente desde la 2020/21.
Actualmente, son pocos los dorsales que restan libres. De hecho, el siete deseado lo lleva Hazard. Pero con el belga más fuera que dentro del equipo, es posible que esa plaza acabe quedando libre. Otro número que sería muy goloso es el 11, que parece que al jugador también le gusta.
Aunque como en el caso de Hazard, también tiene dueño y ya lo luce Asensio. Las opciones se le agotan y mientras Vinicius se conforma con el suyo, no hay nada que preocupe al club.