El partido entre la Real Sociedad y el Real Madrid acabó definitivamente con el futuro de Takefusa Kubo en la casa blanca. El japonés metió la pata hasta el fondo a la hora de cargar contra el árbitro como nunca antes había hecho. El futbolista asiático no estuvo elegante y sus declaraciones no gustaron en Valdebebas. Lógico y normal.
Florentino Pérez, pese a estar en Estados Unidos, estuvo al tanto de todo y le llegó ese comentario tan feo y con muchísima bajeza moral. El presidente tiene claro que el jugador no volverá a vestir la elástica blanca. No hay duda alguna.
Conviene resaltar que el Real Madrid tiene un 50% de sus servicios, de modo que ingresará la mitad de la cláusula, es decir, 30 millones de euros. Así pues, en la zona noble de Chamartín renunciarán a él sin ningún tipo de dudas. Lo tienen bastante claro.
Bien recibidos
Esa cantidad económica será muy bien recibidos por parte de la institución madridista. Bien es cierto que en la zona noble del Bernabéu no tienen intención alguna de hacer una gran venta, pero hay que dejar claro que no vienen nada mal esos 30 'kilos' por un jugador que esta temporada no está en las filas de Carlo Ancelotti.
Esta operación es otro gran ejemplo de la gestión que Florentino Pérez está llevando a cabo en el club blanco. El madridismo tiene motivos para ilusionarse con su equipo, debido a que el proyecto que se está construyendo no puede ser mejor. Y no, Kubo no va a formar parte de él. Tal vez sea esto lo que le fastidie al japonés.