Una modelo israelí ha hecho que el conocido portero del Madrid Thibaut Courtois asiente la cabeza, aparte de aprender hebreo, celebrar el Shabat y hacer donaciones a causas benéficas.
Según cuentan, fue el perro Mylo, uno de los culpables de que se iniciará la relación amorosa entre el portero del Real Madrid Thibaut Courtois y la modelo Mishel Gerzig. Ya que cuando la modelo posó en su Instagram con su mascota, fue el jugador el que le dejó un comentario con el cual empezaron a hablar.
Mishel cuenta que enseguida supo quién era, ya que es fanática del fútbol y que a partir de ahí empezaron a intercambiar mensajes. La relación entre ambos próspero hasta el punto de que la joven se fue a vivir a Madrid con el portero y los dos hijos que tiene con su ex pareja Marta Domínguez. La modelo israelí cuenta que le encantan los niños y más en concreto los de su pareja, del cual reconoce que está completamente enamorada. Por su parte, Thibaut Courtois asegura estar muy feliz con Mishel y muy orgulloso de ella por el servicio militar que realizó en su día.
Realizó el servicio militar obligatorio en su país durante dos años
Si nos ponemos a investigar quién es la chica que ha conquistado el corazón de uno de los mejores porteros del mundo, obtenemos que nació hace 24 años en Eilat, en el sur de Israel. Su padre es taxista y su madre trabajaba como agente de viajes hasta la irrupción del coronavirus. A los 13 años empezó a posar como modelo hasta que con 16, fichó por una agencia internacional. En los veranos viajaba a Milán y Miami, aunque aún estaba lejos de la fama. A los 18 años, decidió hacer la mili, la cual es obligatoria también para las mujeres en Israel, en vez de recurrir a la cláusula que le permitiera un servicio más limitado para poder compaginarlo con el modelaje.
El primero contacto de la pareja fue a través de Instagram
Fue enviada a la Fuerza Naval para dos años de servicio, que incluyó el curso de oficial. Gerzig no siguió la carrera militar y decidió retomar la de modelo para poder ayudar económicamente a su familia. Antes de conocer a Courtois estuvo comprometida dos años con su ex pareja. Tras el primer contacto a distancia que tuvieron a raíz de un emoticono, se reunió en abril con el portero, aprovechando que tenía que trabajar en Madrid, pero fue en Ibiza cuando la relación tomo algo más de seriedad.
La pareja no pasa desapercibida gracias a su fama y belleza y también por la altura. Courtois mide casi 2 metros, mientras ella casi a alcanza 1'80 m de estatura. Aunque la altura para ella, no era una ventaja. Cuando era niña, según cuenta, se sentía extraña en las clases, donde la mayoría de sus compañeras serán mucho más bajas que ella.
Courtois hizo una importante donación a una asociación israelí, en donde ella colabora como voluntaria, ayudando a realizar reparaciones en casas de los supervivientes del Holocausto. Cómo suele ocurrir en las redes, Courtois recibió comentarios negativos por la elección de una pareja israelí a favor de la causa palestina. Aunque la joven no da mucha importancia a este tipo de comentarios, ya que suelen estar acostumbrados a recibir opiniones de todo tipo.