Álvaro Odriozola posiblemente sea uno de los jugadores madridistas más mal parados de los últimos tiempos. Parece que el joven vasco no está teniendo la mejor de las suertes en el Real Madrid a pesar de tener una actitud envidiable: siempre comprometido con el escudo y sin alzar la voz en ningún momento.
El lateral siempre ha acatado todas las órdenes y normas desde su llegada, pero su fútbol no parece convencer en la zona noble del club. El que parecía ser el refuerzo de garantías y sustituto de Carvajal, se ha quedado en nada.
La relación de Álvaro Odriozola e Inés Laffón
Por el camino se perdieron todas las prestaciones que trajeron al ex jugador de la Real Sociedad y que tras varios viajes de ida y vuelta en forma de cesión a equipos como el Bayern o la Fiorentina, sigue sin dar con la tecla más acertada.
Sin embargo, parece que lejos de lo que es el fútbol, las cosas no le van tan mal. Inés Laffón es uno de los motivos por los que el defensa no ha perdido su sonrisa. En una relación que lleva perdurando durante varios años, la pareja se conoció lejos de la esfera del fútbol.
Estos comparten la misma pasión por los caballos y entre establos e hipódromos en compañía de estos animales, surgió el amor de la forma más especial. El lateral siente una gran predilección por los caballos. Hasta es propietario de un purasangre, una de las razas más predilectas de estos animales. Normalmente estos son de competición una de las más privilegiadas.
¿Quién es Inés Laffón?
Inés Laffón pertenece a una familia selecta de empresarios. Su padre también es jinete y su madre posee un alto cargo en un asociación andaluza del autismo. Su hermana se codea con una de las sobrinas del Rey Emérito, Victoria Federica y muchas veces son las que aparecen juntos en redes sociales. Parece que el futbolista tiene altos lujos.