Fede Valverde es uno de los futbolistas que más ha crecido de la plantilla. El uruguayo se ha convertido en una pieza clave para Carlo Ancelotti, especialmente en los partidos de gran trascendencia como fueron los del PSG, Chelsea y Manchester City. El Pajarito fue fundamental para pasar las tres eliminatorias.
El charrúa siempre demuestra que respira madridismo por los cuatro costados. Solo hay que escuchar sus declaraciones en las entrevistas postpartidos y en las convencionales. Tras el encuentro de Champions ante el Inter de Milán en el Santiago Bernabéu, la que fue la última jornada de la fase de grupos y en la que el Madrid ganó por dos goles a cero, Valverde explicó en su página web oficial lo que se siente al defender la camiseta blanca en un partido de la máxima competición continental.
“Vivir un encuentro de Champions League en el Santiago Bernabéu es algo increíble. El estadio se transforma y todos somos conscientes de que se trata de un día especial. La Champions es la competición favorita para cualquier aficionado del Real Madrid. Cada temporada el sueño de todos los madridistas es volver a ganar este título. Y por eso, la responsabilidad que tenemos cuando jugamos estos partidos aumenta”, confesaba el Pajarito.
“El público se transforma y no deja de animarnos ningún instante”
Fede Valverde quiso contar lo que pasa cuando los jugadores llegan al estadio y sienten el calor y la locura de la grada a una hora y media de que empiece el partido, y cuando el Santiago Bernabéu está prácticamente lleno incluso en el calentamiento.
“Desde que llegamos al estadio o estamos en el vestuario cambiándonos antes del choque, sentimos que es especial. Se nota en el ambiente. Una atmósfera que hace que cada noche de Champions sea mágica. El público se transforma y no deja de animarnos ningún instante. Sentir que se dejan la piel por nosotros nos da un plus para pelear cada balón, para correr un poco más y para intentarlo hasta el final”, desvelaba.
Si esto ocurre en un simple choque en el que te juegas simplemente la cabeza del grupo, es muy difícil imaginar lo que sintieron los futbolistas al llegar al estadio el día del PSG o el Manchester City. Aquellos días, el madridismo demostró a todos los que dicen que la afición del Madrid es una afición fría, que están muy equivocados. Los días especiales de Champions, la hinchada blanca demuestra por qué los rivales se hacen pequeños en el templo merengue. Si no, que le pregunten a los citizens o a los parisinos.