El Real Madrid sufrió una derrota que es bastante dura de digerir. Más allá de no poder ganar el título de Supercampeón de España, lo grave es la imagen que volvió a dar, una vez más, el equipo de Ancelotti ante el FC Barcelona.
El conjunto de Hansi Flick fue mejor en todo momento. En LaLiga ganó 0-4 y ayer 2-5, es decir, en dos partidos ha metido nueve goles a los de Ancelotti. El dato es demoledor y, evidentemente, enfada mucho en el seno de la entidad merengue.
El choque, como no podía ser de otra manera, ha dejado a bastantes señalados en el club blanco. Uno de ellos el míster de Reggiolo, que volvió a apostar por Aurélien Tchouaméni y dejó en el banquillo a Raúl Asencio. Además, el equipo no realizó un buen partido y no supo atacar a un Barça con 10 jugadores.

Uno que ha lanzado una clara advertencia al técnico ha sido Josep Pedrerol. El director del Chiringuito de Jugones ha dejado claro que el italiano tiene que tener cuidado sobre su futuro porque Florentino está enfadado. Por tanto, es evidente que de momento continúa, pero que todo podría cambiar en los próximos partidos. Una debacle copera frente al Celta podría suponer su destitución.
Florentino, intranquilo
Florentino Pérez lleva los nervios por dentro y en Yeda se vio a la perfección. Aunque el presidente no estuviera con un rostro enfadado o cabreado, la realidad es que está preocupado por todo lo que está pasando. El equipo no ha dado la talla en los días más importantes de la presente temporada.

El presidente cree que se puede salir de esta situación y que hay nivel en la plantilla para ello. No está satisfecho con el nivel que se está demostrando en el curso actual y le exige más a Ancelotti y compañía.