Antes del lanzamiento de penalti de Harry Kane, que terminaría en el 2-1 a favor del Bayern de Munich y la remontada sobre el Real Madrid, se vio una imagen curiosa que no captaron las cámaras.
En ese momento, Jude Bellingham, a sus tan solo 19 años, decidió romper la concentración de su compañero de selección, quien estaba a punto de lanzar el penalti para adelantar a su equipo.
Kane admitió que Bellingham le dijo algo al oído justo antes de que él tomara el lanzamiento, pero confesó que no logró escuchar claramente lo que le dijo el joven jugador inglés.
Esta situación desconcertó al delantero centro del Bayern de Munich, quien se mantuvo enfocado en su tarea de convertir el penalti a pesar de la distracción del británico.
Bellingham ejerce de líder
El delantero del Bayern destacó que podría haberle preguntado a Bellingham qué estaba tratando de hacer al interrumpir su concentración, pero optó por mantenerse centrado en el lanzamiento.
Afortunadamente para él, la táctica de Jude Bellingham no funcionó y Harry Kane logró anotar el penalti, llevando a su equipo a una ventaja momentánea de 2-1 en el partido.
Esta anécdota muestra cómo los jugadores a veces recurren a tácticas poco convencionales para tratar de influir en el desempeño de sus oponentes en momentos clave del juego y mostró lo pícaro que es el madridista a pesar de su corta edad y experiencia de partidos de altísimo nivel como este.
Aunque el centrocampista de Birmingham intentó desconcentrar a Kane, este último demostró su capacidad para mantener la calma y la concentración en situaciones de alta presión.