Ancelotti siempre ha visto a Tchouaméni como uno de los mejores pivotes del mundo. Sin embargo, en este curso le está reconvirtiendo en central para sustituir a Eder Militao. En el curso pasado ya jugó allí en el enfrentamiento contra el Manchester City en el Santiago Bernabéu y realizó un gran partido. De momento, en esa posición le está dando bastante suerte.
"El Real Madrid no ha perdido ningún partido en el que Tchouaméni haya jugado como central (11 victorias, 4 empates). La fórmula de Ancelotti está funcionando", publicaron en el diario Marca. Los números no engañan y lo cierto es que son bastante significativos. El centrocampista francés puede hacer un gran trabajo como defensa.
De momento, ese va a ser el planteamiento de Ancelotti en los partidos más importantes de la temporada. De esta manera, Raúl Asencio se quedaría como tercer central y como jugador de rotación. El canterano madridista ha demostrado que puede rendir muy bien en el primer equipo, y por eso lo van a tener en cuenta. Así, el cuerpo técnico podrá dar descanso a Antonio Rüdiger, que lo está jugando prácticamente todo y ya tiene 31 años.
El caso Asencio
El canterano madridista ilusionó mucho al madridismo en los partidos en los que jugó con el primer equipo. Recordó mucho a Nacho Fernández por su personalidad y su seguridad atrás. No cometió muchos errores y fue capaz de hacerlo hasta mejor que Rüdiger en algún encuentro. Aun así, Ancelotti ve más potencial en Tchouaméni, que ya tiene más experiencia en la élite.
Eso no quiere decir que ya no vaya a contar con Asencio durante la temporada. Como dije antes, el jugador va a rotar a lo largo del curso y va a ser fundamental para que todos los defensas puedan estar en su mejor estado de forma. Va a ser necesario, porque todavía faltan cinco competiciones por disputarse y la cantidad de lesiones que están sufriendo los jugadores madridistas son preocupantes. Aunque no le guste, Ancelotti va a tener que rotar.