Este próximo miércoles, el Real Madrid se medirá a la Atalanta buscando el primer título de la temporada, la Supercopa de Europa. Será el primer partido oficial para los blancos, pero también podría ser el debut de Mbappé, que después de quedarse en la capital española y no acudir con el equipo a la gira por Estados Unidos, puede estar ante su gran día.
Ancelotti ya anunció que jugarían los mismos de la temporada pasada, metiendo a Militao por Nacho y todo apunta que a Kylian por Kroos, los dos jugadores que se han marchado y que fueron titulares en Wembley. El otro cambio sería el de Tchouaméni por Camavinga, ya que el primero se perdió la final de la Champions por lesión.
Esto permitirá ver las primeras líneas maestras del proyecto de Ancelotti, que se enfrenta a un reto complicado. Es por ello que el entrenador ha querido tener todo muy medido y de hecho ha tenido una charla con Mbappé, para dejárselo todo claro de cara a la Supercopa. Y es que han dejado pactado todo para que no haya problemas.
El reto de Ancelotti con Mbappé
Arranca una temporada en la que Ancelotti sabe que tendrá que afrontar un duro reto. No está Kroos, el jugador por el que pasaba el fútbol del equipo, el encargado de organizar desde atrás y un pilar básico en la forma que tenía el Real Madrid de ejecutar su plan sobre el campo. Ahora, el técnico italiano tiene que buscar una fórmula distinta.
Y esta pasa precisamente por Mbappé. Carlo quiere adaptarse a las cualidades del nuevo jugador que tiene, para potenciar las virtudes de la plantilla actual y no querer seguir haciendo lo mismo que hacían, ya que falta un futbolista como Kroos y no hay nadie que se pueda encargar de sus labores, con la misma eficacia que tenía el alemán.